
Hoy ha invadido mi mundo,
con la fuerza destructora necesaria
para que todo vuelva a reconstruirse.
Mi cuerpo se ha empapado con miles de gotas de agua
y la caricia del viento ha despeinado mis cabellos.
Por un instante, todo se ha descompuesto.
Ahora, cuando cae la noche
y la tormenta ha pasado
camino por la playa buscando las piezas
para recomponer el mañana.